Canto. Y de mi voz sale todo lo que largamente he acumulado. Lo siento fluir a través de las vocales (no entiendo como podrían los húngaros fluir con la vida con una lengua aglutinante; como los polacos son más consonánticos que vocálicos).
Pero, aunque es mi voz, la siento ajena. Es mi tono, es mi color de voz. Pero no sale a borbotones, sino forzada, expelida, empujada. Mi corazón parece aferrado a lo que la mente y él saben que debe partir.
Repito la canción. Dos veces más.
Al fin me oigo cantar a mí. Oigo mi voz. Mi tono. Mi color. Mi fluir.
Soy yo la que canta y es mi voz la que fluye.
4 comentarios:
Miss Lulú
Qué bien cuando es capaz de cantar y de fluir, d e dejarse ir, pero sobre todo es consciente de ello, ya va de gane,
Un abrazo
PS Hoy tendré un día laboral tenso y denso, así que necesito de su energía cantarina
Miss Marichuy:
Usted cree que voy de gane?
Habré de creer en su sabiduria. Al fin y al cabo, tenía la de su abuela desde su más tierna infancia... y ya eso sí creo yo que es ir de gane!:D
Pues, fíjese, qué coincidencia: nuestros días laborales serán intensos hoy. Así que le mando mi energía cantadora y me quedo con su calma sonriente para cuando a mí se me desboquen las pasiones y me repita quedito al oido el "sólo por hoy agradecerás, sólo por hoy no te enjarás, sólo por hoy tratarás amablemente a los demás... sólo por hoy... sólo por hoy...".
Son 3 de mis 5 mantras del reiki para la vejez gozosa, porque no creo que me haya hecho yo más sabia, sino más paciente... jajajajajajajaja...
Le dejo un abrazo!!
si cantan las ranas que no cantes tu lulis
Eduardito:
Jajajajajajajajajaja... Claro que no!!!
Jajajajajajajajajaja...
Ellas cantan con la lluvia, yo canto sólo cuando hay sequía y me aburro en las eternas trancas del tráfico caraqueño.
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