26 ago 2009

Esencialmente nosotros

Se nos pasa la vida queriendo crecer, queriendo volar, anhelando ir más allá, haciendo más...
Al final, ¿lo logramos?
Al final, ¿valió la pena?
Al final... ¿qué somos? ¿Somos "esencialmente" nosotros?
¿Somos más que nosotros?
¿Somos los que podíamos llegar a ser?

Ante las dudas más nos vale ponernos en marcha:
Seguir aspirando a subir.
Seguir aspirando a mejorar.
Seguir aspirando a soñar.

Porque no pueden haber equívocos cuando se sueña
Cuando se logran cosas para el bien de varios, o muchos...
... o simplemente el bienestar más individual, en consonancia con el respeto al otro.

Creo que no hay equívocos cuando, con amor:
Se entrega
Se corrige
Se ayuda
Se guía
Y se avanza, a veces apoyado en otro.

Somos, siempre fuimos.
Pero siempre hemos de avanzar buscando ser más que "yo mismo".
Es erróneo pretender avanzar queriendo ser más que "él" o que "ella" o que "ellos".
Es yo conmigo, yo a favor de mí, yo para mejorarme a mí.
Esa es la visión correcta...

Es esa la única visión en la que no se da paso a la envidia ni al rencor... porque sabemos que cada quien puede lograr sólo lo que siente que puede dar y hacer.

Es así como se valora sinceramente y se felicita desde la alegría genuina a aquel que ha logrado un sueño o una meta.. .porque sabemos lo que se necesita para hacerlos posibles y reales.

Es así como nos hacemos más comprensivos y más pacientes... porque el que se desespera nos recuerda a nosotros mismos al principio de nuestro andar y el impaciente nos hace sonreir, tirándonos en cara nuestra sabia madurez en cuanto a la valoración del tiempo versus el resultado.

Es así, solamente así, que nos hacemos más comprensivos y optimistas... porque sacaremos energías de nuestra fatiga para motivar al que se entristece y valoraremos cada obstáculo como una ocasión para aprender y crecernos dentro de cada uno de nosotros.

Así que, no importa si sólo somos "esencialmente" nosotros al final del camino. Siempre seremos algo. Y más nos vale ser lo mejor que podíamos sacar de nosotros mismos.

6 comentarios:

Yo NO SOY Cindy Crawford!! dijo...

Buuuuuuuuuuuuuuuuuaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!! Mala mamá! mala mamá!!!

:P

Te acordás de eso?????
jjajajajaj


Mala Lulú! mala!!

Lulu dijo...

Jajajajajajajaja...

Claro que me acuerdo, boluda!! Jajajajajaja...

Casi te ví con el berrinche en la sillita de comer, como el monstruito de dinosaurio que era ese... jajajajajaja...

Y te voy a tener que poner en cuarentena de mi blog: el amor te puso particularmente llorona, no?

Juajuajuajua... LOL

Un abrazote para que llores todo lo que quieras en mi hombro...

El Lord dijo...

Lo que vale, lo que no vale.....
Con leer el último parrafo suficiente!!

Lulu dijo...

Y sí, por eso lo puse de conclusión...

Potter dijo...

Lulú

Muy bien dicho, lo que prima es la autenticidad innata de cada uno, sin importar las afectos compartidos, ni las evoluciones a las que nos veamos comprometidos. Un abrazo Querida, y necesito hablar por Skipe un rato con vos

Lulu dijo...

Eso, la autenticidad y la decisión de mejorar. Sin que nos importe si lo estamos todo lo bien que podríamos hacerlo desde el primer momento: empezar el camino, empezar a querer mejorar, ya es una mejora. Hacer un poquito, cada día, es más benéfico que el que sólo hace a trancos un día y luego olvida todo un tiempo...

Y por e-mial cuadramos, my sweetie pie! :D